Todos a casa

El 8 de septiembre de 1943, tras el armisticio, el ejército italiano se pierde en la confusión general. Desaparecen los puntos de referencia de las tropas y los soldados empiezan a volver a casa. Alberto Innocenzi, subteniente de complemento, meticuloso y cumplidor con su deber, intenta mantener unidos a sus soldados y encontrar algún mando al que presentarse. Sin embargo, la situación es tan confusa que el proprio Alberto se rinde y decide emprender la fuga junto con el sargento Fornaciari, que está impaciente por volver a su casa, y al gastador Ceccarelli, que se dirige al sur porque está de permiso. Abandonado el uniforme y vestido de paisano, Alberto, se refugia en casa de Fornaciari, cuya familia es exterminada por haber ofrecido hospitalidad a un americano. Poco después, asiste a la marcha de los partisanos hacia el monte y a la captura de una joven judía por parte de un grupo de alemanes. Sin embargo, como todos los demás, Innocenzi sólo piensa en salvarse y volver a su casa. Cruza Italia con Ceccarelli y llega a la región de Lacio, donde le espera su padre para alistarlo en el Ejército de la República Social Italiana de Mussolini. Innocenzi se niega y se marcha hacia el sur, siempre junto con Ceccarelli. Tras entrar a formar parte del Todt, en Nápoles los dos se ven envueltos en el estallido de la insurrección. Ceccarelli, que ha sobrevivido a tantas aventuras, es asesinado por los alemanes justo cuando está a punto de llegar a su casa. Innocenzi, lleno de rabia y desesperación, se rebela y empieza a disparar con una ametralladora contra los alemanes

ronaldomake