Los Relojes

El teniente Colin Race de la Marina Real, que investiga la trágica muerte de su novia y otro agente, pasea por Wilbraham Crescent cuando de repente Sheila Webb sale corriendo del número 19 y angustiada se le echa a los brazos. Se ha hallado tendido en el suelo el cuerpo sin vida de un hombre de mediana edad que ha sido apuñalado. Poirot viaja a Dover para ayudar a Race a averiguar si Sheila es la asesina. Ella asegura que no conocía a la víctima y tampoco a la señorita Pebmarsh, una chica ciega y propietaria de la casa. La señorita Pebmarsh no se encontraba en la casa cuando se halló el cuerpo y niega haber solicitado ese mismo día por teléfono los servicios de Sheila, una mecanógrafa. Poirot analiza las complicaciones del caso.

jrc