| SINÓPSIS |
El 16 de febrero la flota norteamericana comienza los bombardeos sobre Iwo Jima. La necesidad de tomar la isla es incuestionable dado que su aeródromo es imprescindible para el ataque sobre Japón. Iwo Jima posee dos bases aéreas a tan sólo tres horas de la capital nipona. El teniente general Holland Smith desembarca con la 4ª y 5ª División de Marines. El 23 de febrero se alcanza la cima del monte Suribachi. La colocación de la bandera norteamericana por los marines da lugar a una de las fotografías más famosas de la segunda Guerra Mundial.
La Operación Iceberg está pensada para conquistar la isla de Okinawa. La isla, a tan sólo 500 km. de Tokio, posee, al igual que Iwo Jima, dos aeródromos, convirtiéndola en un perfecto trampolín para la futura invasión de Japón. Los kamikaze y los nidos de ametralladoras comunicados por túneles convierten la invasión de las tropas aliadas en un auténtico infierno. Los japoneses pierden el Yamato, el mayor acorazado del mundo, que se encontraba en una misión suicida. El 22 de junio de 1.945 cesa toda resistencia en la isla, y el teniente general Ushijima, al mando de la guarnición, se suicida.
Dan comienzo los bombardeos a gran escala sobre Japón. El 28 de julio, el primer ministro Suzuki anuncia que no acepta los acuerdos de la conferencia de Potsdam. El 6 de agosto el b 29 Enola Gay lanza la primera bomba atómica sobre Hiroshima, y el día 9 la segunda bomba cae sobre Nagasaki. El 10 de agosto, Hirohito anuncia su voluntad de rendirse.
A bordo del acorazado Missouri, el general Douglas MacArthur, Comandante Supremo de las Fuerzas Aliadas, certifica junto a las autoridades japonesas la firma que pondrá fin definitivamente a la Segunda Guerra Mundial..
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